lunes, diciembre 10, 2012

Elia Casillas, POR ESTA HEBRA

Hay manos que no debieron nacer nunca,

sigo detenida en sus palabras,

ya puede descansar,

me ha arrancado el ánimo,

ahora es el espejo

donde mi rostro enloquece.

Voy con tu mirada queriéndome los hombros,

sobre mis costillas se detiene la vida

que ha perdido arreos

y observa su fe mutilada entre miserables,

corre la sangre sin prisa,

Dios cae en cualquier sitio

menos donde me abrazo

y esta carne

no encuentra la configuración de sus dedos,

con tijera negra quito mi disparate rosa: para

siempre.



Fragmento del poema: POR ESTA HEBRA

No hay comentarios:

Publicar un comentario